2008/08/28

El debate sobre el socialismo tiene que intensificarse

Asistieron delegaciones de organizaciones revolucionarias de México, Guatemala, República Dominicana, Haití, Venezuela, Colombia, Perú, Argentina y Brasil.
Numerosas y muy interesantes exposiciones que se hicieron en la décimasegunda edición del Seminario Internacional “Problemas de la Revolución en América Latina”. “Debate Actual sobre el socialismo” fue el tema que se desenvolvió en los cinco días que duro este evento.

Asintieron delegaciones de organizaciones revolucionarias de México, Guatemala, República Dominicana, Haití, Venezuela, Colombia, Perú, Argentina, Brasil, y cerca de 500 delegados de las organizaciones sociales y políticas del Ecuador. He aquí un brevísimo resumen de algunas de las exposiciones publicadas de dicho Seminario.


El socialismo debe destruir el estado burgués
Al permitir el debate de la teoría revolucionaria y promover la solidaridad entre las organizaciones revolucionarias de nuestro continente, el Seminario Internacional “Problemas de la Revolución en América Latina” constituye sin duda un importante instrumento de unidad de la izquierda revolucionaria.

Tal debate se torna mucho más urgente cuando vemos el creciente interés de las masas trabajadoras por el socialismo, al par que un número importante de líderes políticos hoy se autotitulan socialistas, sin embargo poco o casi nada hacen por defender la ciencia fundada por Marx, Engels, Lenin y Stalin.

Un aspecto importante a considerar en este debate es la función principal del Estado, que es servir a la clase dominante y, en particular, reprimir a las clases explotadas.

En otras palabras, la clase burguesa (los capitalistas) tiene la necesidad del dominio político para defender sus intereses egoístas y sus privilegios. Por eso, toda vez que la clase obrera se lanza contra sus explotadores, el Estado lanza a la policía o al ejército contra los trabajadores.

Luego, un socialismo que no destruye el estado burgués, no consigue acabar con la propiedad privada de los medios de producción, ni con la explotación del hombre por el hombre y, por eso mismo, no puede ser llamado socialismo.

Conquistar el poder político por medio de la revolución, establecer la dictadura del proletariado en sustitución de la dictadura de la burguesía, es una condición esencial para la construcción de la sociedad socialista.